La calidad de nuestros vinos
nace en el viñedo

LA VID

Bodegas Pandora posee una importante superficie de viñedo, muy particular, que garantiza la semejanza en la calidad de nuestras uvas. El viñedo está distribuido a lo largo de varias fincas en los términos municipales de: Rueda, Nueva Villa de las Torres, El Campillo, Torrecilla de la Orden y Olmedo.

 

Los viñedos más antiguos de Bodegas Pandora son de 1980 y la edad media es de 25 años, podemos decir que se encuentran en un momento perfecto de equilibrio entre producción y calidad. El 100% de la plantación está en espaldera, no buscamos altos rendimientos, pero sí uva de la mayor calidad posible.

 

En el viñedo actual contamos principalmente con la variedad Verdejo (90%), considerada la variedad blanca Reina en Castilla y León, y una pequeña parte Sauvignon Blanc, (10%) originaria de la región francesa de Burdeos, en nuestro país solo la encontramos en la DO Rueda y en la DO Penedés.

 

Impulsamos la calidad de nuestros vinos desde su origen, el viñedo, realizando una serie de labores que ayudan a la planta a mejorar la calidad del fruto, como la poda en verde, (después de la brotación de las yemas y cuajado, se eliminan las sobrantes para una producción de calidad), y el aclareo de racimos, (Antes del final de la maduración se eliminan más racimos para la mejora de la calidad. Consiguiendo así un rendimiento por hectárea de no más de 6.000kg).

EL SUELO

La importancia del suelo se debe a que las raíces de la planta van absorbiendo sustancias que se encuentran en él. Estas sustancias son diferentes en cada tipo de suelo. Cuanto más original sea el suelo más original será el vino.

Los suelos de Bodegas Pandora son diferentes y originales en cada una de sus parcelas:

Suelos arenosos y cascajosos: Aportan intensidad  aromática  a  nuestros  vinos y facilitan  el  drenaje del agua. También evitan focos de humedad, facilitando la reflexión de la luz y evitando desarrollos de hongos en la planta consiguiendo maduraciones mejores.

Suelos arenosos con canto rodado: Estos suelos facilitan la permeabilidad y el drenaje de las viñas, otra característica de estos suelos es que color claro de los cantos refleja la luz del sol, por lo que ayuda a regular la temperatura de la planta.

Suelos arcillosos: Tienen más capacidad para retener agua y nutrientes. Los vinos resultantes son elegantes, estructurados, gracias a que los ciclos de son más largos y esto provoca una mayor carga de polifenoles durante la maduración.